El hallazgo de una lancha quemada este viernes por parte del Servicio Nacional de Guardacostas en el Caribe Norte del país desencadenó una serie de acciones policiales que culminaron con la captura de una lancha sospechosa.
El descubrimiento de la presunta narco embarcación se dio cerca de las 05:42 de la mañana cuando un contingente de la estación del Guardacostas de Limón se encontraba patrullando en el sector de Parismina a bordo de la lancha “Rambito”.
En su recorrido por este sector del Caribe Norte concretamente en una bocana ubicada la altura de la localidad de Caño Goshen de Matina a unos dos kilómetros de la bocana del río Pacuare, los oficiales divisaron una lancha tipo Eduardoño quemada al igual que sus motores con una potencia de 200 caballos cada uno.
Este hallazgo motivó una intensa búsqueda por agua y aire pues al lugar fue desplazado un helicóptero del Servicio de Vigilancia Aérea mientras que las tripulaciones de las lanchas del Guardacostas Estrella 1 y Penshurt también emprendieron una intensa búsqueda lo que permitió localizar cerca de allí varias botellas, recipientes con cuartos de aceite y restos de comida.
Al continuar el patrullaje por la zona los oficiales de la Estrella 1 le dieron persecución a una embarcación particular de nombre “La JJ”, con matrícula limonense 1593-L, la cual fue interceptada cerca de Matina y todos sus seis tripulantes de inmediato fueron aprehendidos.
Dos de los detenidos son ampliamente reconocidos por las autoridades limonenses ya que presentan antecedentes por atentar contra el ambiente como lo es pesca ilegal y caza de tortugas, también por transporte de personas en lanchas no inscritas, irrespeto a la autoridad y alteración del orden público.
Los aprehendidos son un nicaragüense que dijo apellidarse Ruiz Martínez y cinco costarricenses, identificados con los apellidos Joseph Méndez, Monge Bonilla, González Cruz, Martínez Martínez y Bejarano López, quien se encontraba en estado de ebriedad.
Tanto la embarcación como los detenidos fueron llevados hasta estación del Guardacostas de Moín, donde la nave fue revisada esta tarde por personal de la fiscalía local, la Policía de Control de Drogas y la Unidad Canina.
Sin embargo, hubo que ponerlos en libertad, pues no se les pudo ligar con la lancha quemada, dado que no se logró encontrar ningún cargamento de droga oculto en la embarcación, aunque en los motores si dio positivo la prueba efectuada con los perros entrenados en la detección de drogas.
No obstante los patrullajes continuarán en la zona para detectar algún posible cargamento de droga que haya sido ocultado por presuntos narcotraficantes.