La sentencia se dictó contra dos hombres de apellidos Almengor Pimentel y Castillo Aguilar por un homicidio ocurrido en Corredores, Puntarenas.
Los hechos ocurrieron el 18 de marzo de 2007 en horas de la madrugada en el centro de Ciudad Neilly cuando al parecer los sujetos se encontraron con la víctima.
Se presume que sin motivo alguno ambos propinaron una golpiza a puñetazos y patadas a la víctima hasta dejarlo tendido en el suelo.
La víctima quien al parecer se encontraba en estado de ebriedad murió en el lugar como consecuencia de la brutal golpiza.